Contiene un conjunto de magníficos estudios sobre la contribución de las mujeres al florecimiento y al desarrollo del teatro español en los siglos XVI y XVII; se rescatan -casi- del anonimato actrices tan celebradas como la italiana Bárbara Flaminia (gran propulsora de la “commedia dell’Arte” en el siglo XVI) o las españolas Jusepa Vaca y María de Heredia (que en el siglo XVII gastaron sus mejores años en las tablas), o un elenco de actrices que actuaron en La Rioja, a lo largo del mismo siglo. Otros trabajos exponen interesantes opiniones sobre algunos personajes femeninos concebidos por Lope de Vega, Mira de Amescua, Vélez de Guevara, Rojas Zorrilla y Calderón de la Barca. El destape femenino en la escena, la mujer vestida de hombre, el hombre disfrazado de mujer, la mítica ave asexuada y el lujoso vestuario exigido en el periodo barroco también so objeto de consideración y estudios impecables. Un último campo de análisis está dedicado a las mujeres que, durante ese Siglo de Oro de las letras españolas, dedicaron parte de su tiempo y de su ingenio a escribir comedias.
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